Declaración de posicionamientos y buenas prácticas en el ejercicio profesional de la logopedia
11. Trastornos de la resonancia
Descarga el capítuloEl logopeda es el profesional sanitario competente para prevenir, diagnosticar e intervenir en los trastornos de la resonancia, con formación especializada en la evaluación anatomofisiológica y funcional, así como en las técnicas terapéuticas propias para la mejora, la rehabilitación y el mantenimiento del habla y la resonancia afectadas.
El CLC impulsa la investigación para conocer la prevalencia local de los trastornos de la resonancia, desarrollar instrumentos de evaluación específicos en catalán y castellano, así como establecer intervenciones basadas en la evidencia científica que mejoren la comunicación, la calidad de vida y la autoimagen de las personas afectadas.
El CLC defiende un abordaje interdisciplinario para garantizar una atención integral, que coordine a logopedas, neurólogos, otorrinolaringólogos, estomatólogos, cirujanos maxilofaciales, psicólogos y profesionales de la voz artística cuando sea necesario, y promueve la prevención, la sensibilización, la derivación adecuada y la aplicación de medidas de seguridad en los centros sanitarios para llevar a cabo las exploraciones y los tratamientos.
Equipamiento
El CLC orienta a los profesionales de la práctica clínica a disponer de elementos de equipamiento específico como son los espejos, los dispositivos de retroalimentación visual (mecánicos o digitales) o auditiva y mecanismos de presión aumentada a la hora de intervenir en trastornos de la resonancia. La captación de muestras de voz para las valoraciones y las estrategias de feedback propias del tratamiento rehabilitador requieren disponer de equipamiento de grabación y de análisis digital de la voz (grabadoras digitales, micrófono y ordenadores equipados con software especializado. Existen opciones de software libre validadas).
Como en todas las acciones de exploración o intervención logopédica que invaden el cuerpo del paciente, si estas pueden suponer un riesgo para su seguridad, deben realizarse en un centro sanitario que pueda dar respuesta adecuada a la situación de riesgo. Cabe recordar que, en este contexto, los logopedas pueden usar el espejo intraoral o la palpación exclusivamente como maniobra para la valoración funcional del gesto articulatorio o bien como estrategia terapéutica.
Es fundamental que los logopedas apliquen estrictas medidas de higiene para garantizar la seguridad tanto de los pacientes como de sí mismos. Estas medidas incluyen la desinfección regular del material y superficies de trabajo, el lavado de manos antes y después de cada sesión, el uso de utillaje de un solo uso cuando sea posible, y la ventilación adecuada de los espacios. Además, en los casos que así lo requieran, como en situaciones de riesgo de contagio, es importante utilizar mascarilla y guantes, y seguir los protocolos establecidos por las autoridades sanitarias. Estas prácticas son esenciales para prevenir infecciones y crear un entorno terapéutico seguro y de confianza.