Declaración de posicionamientos y buenas prácticas en el ejercicio profesional de la logopedia
9. Disartria
Descarga el capítuloEl logopeda es el profesional sanitario competente para la exploración, el diagnóstico y el tratamiento de trastornos del habla como la disartria, y debe mantener una formación especializada en neuroanatomía, control motor y técnicas terapéuticas basadas en la evidencia para la rehabilitación y el mantenimiento de la función comunicativa.
El CLC promueve la investigación para conocer la prevalencia local de la disartria, desarrollar instrumentos de evaluación e intervención en catalán y castellano, y crear conjuntos básicos de categorías CIF que permitan identificar los efectos de la disartria en la participación y la calidad de vida.
El CLC defiende un abordaje interdisciplinario e integrador para la persona con disartria, que incluye el trabajo coordinado con médicos neurólogos, rehabilitadores, psicólogos y otros profesionales, así como el apoyo a la familia y la prescripción adecuada de sistemas aumentativos y alternativos de comunicación cuando sea necesario. Aconseja evitar técnicas sin evidencia científica.
Intervenciones no recomendadas
El CLC orienta evitar el uso de las técnicas de terapia del mecanismo velofaríngeo que se basan en movimientos sin hablar. Estas técnicas no han sido avaladas por las siguientes razones: a) las medidas implican diferentes mecanismos subyacentes; b) no existe ninguna evidencia de que aumente la fuerza del paladar blando ni mejora el rendimiento del habla; c) la mayoría de estas técnicas no proporcionan al paciente información propioceptiva del gesto articulatorio durante el habla. Concretamente, es necesario evitar:
- Técnicas de empuje (especialmente para pacientes con disartria espástica).
- Ejercicios de fortalecimiento tales como soplar y chupar.
- Tareas que animan al paciente a controlar y modificar el flujo del aire mediante bolas, velas, papel, burbujas, pajitas, etc.