Declaración de posicionamientos y buenas prácticas en el ejercicio profesional de la logopedia
Adenda. Calidad y seguridad en la práctica logopédica
Descarga el capítuloIntroducción
La seguridad constituye uno de los ejes fundamentales de toda práctica sanitaria y la logopedia no es una excepción. Las intervenciones logopédicas implican trabajar con personas con vulnerabilidades específicas, con dificultades de comunicación, deglución, voz o habla, que requieren un entorno seguro, preparado y adaptado a sus necesidades.
Esta seguridad va mucho más allá de la prevención de riesgos laborales y físicos. Incluye el bienestar emocional del paciente, la protección rigurosa de su información personal y clínica, la seguridad alimentaria en los casos de disfagia, así como las condiciones de trabajo que deben garantizar la salud física y psicosocial de los propios profesionales. La seguridad, en este sentido amplio, depende en gran medida de la actitud y los comportamientos que adoptan tanto los individuos como las organizaciones y empresas donde se prestan los servicios. Se trata, pues, de garantizar la seguridad de los pacientes y de los logopedas.
Los avances tecnológicos, como la creciente implementación de la práctica en línea, y el aumento de la complejidad de los casos, especialmente en población geriátrica, pacientes con enfermedades neurodegenerativas o niños con trastornos complejos, comportan que el concepto de seguridad sea cada vez más amplio y dinámico.
Este texto pretende recoger los principios generales, las condiciones concretas, los protocolos y las buenas prácticas que garantizan un entorno seguro para los pacientes y los profesionales de la logopedia.